En medio de un cotillón de colores, música, cantos, humo de bengalas y banderas se jugó en el estadio de Juventud Unida “Alberto Durán” el clásico Rosarino. Por un lado se presentaba, el local Juventud Unida, para muchos el gran candidato a quedarse con el triunfo, puesto que las estadísticas marcaban que “La Juve” venía de ganar los últimos dos partidos por el torneo local.
Mientras que por el otro lado Olimpia Oriental, se reforzó con cuatro jugadores que no participan del torneo local, más la vuelta del Gaucho Héctor Iparraguirre, pieza fundamental en el equipo Celeste.
El partido comenzó como se esperaba con el local volcado al ataque. Más seguro, más preciso, mejor parado en el campo de juego. Ante el conjunto celeste que parecía desconcertado.
Olimpia la pasó bastante mal en los primeros 15 minutos, hasta sufrió un gol que fue anulado por posición adelantada del “Cumbia” Álvarez.
15 minutos duró la furia de “La Juve”. Olimpia de a poco se fue asentando en el campo. De a poco iba ensamblando juego. Luego de los primeros minutos, la situación dentro del campo de juego de puso fea. Esto provocó que los locales perdieran el control del juego, ya no era el mismo equipo que había comenzado el partido a los 27 minutos .
Una jugada que se inicia por derecha. Andrada que toca hacía el medio . Ríos que recibe dentro del área grande y ante la salida del central, la suerte se le presenta a Emmanuel Correa que con todo el tiempo del mundo domina el juego y con un violento remate al ángulo superior izquierdo de Incerti, pone a Olimpia arriba en el marcador. Con este resultado se irían al descanso.
En el segundo tiempo las cosas no cambiaron mucho. A los 10 minutos, el árbitro expulsa al Ema Correa a instancias del juez de línea. La visita con un jugador de menos tubo que redoblar esfuerzos.
Y ahí empezó a aparecer la experiencia de varios jugadores. Con batería Guanca comenzando la defensa, más la Sapiencia de Facundo Ríos. ni hablar de la presencia que le da el Gaucho al equipo desde el arco y Diego Rodríguez cuando podía escapar de la férrea marca que le imponía el rival, son algunas cosas que se pueden destacar.
En este ir y venir del partido, comenzó a crecer la figura del partido. Facundo Andrada que se hizo cargo y se puso el equipo al hombro. La pedía. La aguantaba, generaba faltas y jugadas. Una de esas pudo terminar en gol pero la pelota paso a centímetros del arco defendido por Incerti.
La visita impuso el ritmo y las condiciones del partido y el conjunto local entró como por un túnel. Finalmente Olimpia se quedó con el primer chico. Victoria ajustada, como todo clásico pero victoria al fin. Todavía faltan 90′ y el resultado está abierto.
El partido tuvo un buen marco de público y algunos incidentes casi al final en donde fueron expulsados:el técnico, el ayudante de campo y el jugador Aramayo que estaba de suplente en el equipo de Juventud Unida.
