Se trata del primer auto eléctrico fabricado en nuestro país y una de cuyas unidades fue adquirida por el vecino Luis Piromalli.
El primer auto eléctrico fabricado en la Argentina ya tiene uno de sus ejemplares en Trenque Lauquen. Y, como no podía ser de otra manera, su propietario es Luis Piromalli, un vecino que a lo largo de su vida ha mostrado un incesante interés por las novedades, al punto tal que cuenta en su haber con varios inventos,
El último viernes y luego de un año de espera recibió su nuevo vehículo, el “Tito”, un automóvil completamente eléctrico que adquirió tiempo atrás, cuando recién se encontraba en pleno proceso de desarrollo.
Se trata de un auto compacto y de pequeñas dimensiones que ya circula por nuestras calles y que, sin lugar a dudas, se roba todas las miradas a su paso.
Ecología
Fue el propio Piromalli quien explicó en una entrevista con medios locales cómo fue que el “Tito” llegó a nuestra ciudad: “Estaba en desarrollo y lo compré hace un año. Estoy muy contento, tiene un consumo muy bueno, cargué 10$ de electricidad y con eso hacés 100 km. Es un coche para gente grande o para ir a trabajar. Esto es el futuro, con baterías de 8 años de garantías y puede durar hasta 12 años. Es un gran aporte a la ecología”
Durante el fin de semana fueron muchos los vecinos que ya vieron al “Tito” circular tranquilo y sin prisa por las calles de Trenque Lauquen. Parafraseando a Carlos “el Indio” Solari “el futuro llegó hace rato”. Y en estas latitudes no podía ser de otra manera que de la mano de alguien como Luis Augusto Piromalli.
Características
Cale destacar que el “Tito” es un modelo netamente urbano desarrollado y producido en San Luis por la empresa Coradir S.A, dedicada a equipos electrónicos e informáticos, servicios de Internet, integración de sistemas y desarrollo de software a medida.
Técnicamente es un tres puertas de 2,83 m de largo por 1,50 de ancho y 1,56 de alto, homologado con cuatro plazas y construido con carrocería de chapa. Está dotado de un motor eléctrico que entrega 4.5 kWh de potencia, el equivalente a unos 6,12 CV, que recibe energía de una batería de litio-ferrofosfato colocada debajo del piso, con una capacidad de 8 kWh. Esta cifra le permite –según el fabricante-recorrer alrededor de 100 kilómetros hasta la próxima recarga, que se logra enchufándolo a un toma doméstico de 220V como cualquier artefacto del hogar y se completa en un lapso de entre 6 y 8 horas, más allá de que también permite cargas parciales. Se vende con el cable para enchufarlo, la tracción es a las ruedas traseras y la ficha técnica indica una velocidad final de 65 km/h.
Ademas el “Tito” gasta en promedio hasta 10 veces menos que un auto de combustión. Una caprichosa comparativa arroja que, dependiendo del costo del kWh (kilovatio por hora) y precio del combustible por provincia, traducir un recorrido de 100 kilómetros con 8 kWh puede equivaler entre $55 y casi $80, mientras que la misma distancia con nafta súper (consumo mixto promedio de 9,5 l/100km) puede variar de $830 a $1070, y de $1188 a $1287 con nafta premium.
