El gobierno de ese país informó que las reservas están al 1,8% de su capacidad, por lo que deberán abastecerse con los recursos del Río de la Plata a pesar de la alta concentración de sal que contiene.
La situación de sequía que vive Uruguay no tiene precedentes y los pronósticos no son alentadores. Autoridades del gobierno de Uruguay informaron este martes que sus reservas de agua potable están al 1,8% y que podrían acabarse dentro de una semana o diez días, lo que los obliga a recurrir al Río de la Plata para abastecerse, a pesar de los elevados porcentajes de sal que contiene.
Por lo pronto, desde el Instituto de Meteorología de Uruguay (Inumet) señalaron que no se esperan precipitaciones de consideración a corto plazo sino que, como mínimo, deberán esperar hasta la primavera.
Según el reporte oficial, en la represa de Paso Severino, ubicada en el curso inferior de río Santa Lucía Chico y principal fuente de agua dulce de la zona metropolitana, hay 1,1 millones de centímetros cúbicos de agua, de los cuales se utilizan 80.000 al día.
El presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, ya había advertido que se avecinaba un período en el que el agua no se podría beber, a menos que lloviera lo suficiente o que se terminen diversas obras hídricas que se están realizando en Paso Belastiquí para llevar agua dulce desde el río San José hasta el Santa Lucía. Si bien eso no resolverá la situación porque el agua seguirá conteniendo sodio y cloruro, al menos servirá para nutrir por un período de tiempo el caudal de agua de Obras Sanitarias del Estado (OSE), la empresa estatal del área.
Según voceros de la presidencia, el promedio de cloruro presente en el agua de OSE en Montevideo y su zona metropolitana es de 845, 837 y 842 mg/l en las líneas de bombeo 4, 5 y 6, respectivamente.
El nivel máximo de cloruro autorizado por el Ministerio de Salud, tras el pedido del aumento por parte de OSE, es de 720 mg/l, por lo que todas las líneas exceden el límite. En cuanto al sodio, se registró un promedio de 501, 497 y 499 mg/l en las líneas de bombeo 4, 5 y 6, respectivamente. El máximo de sodio autorizado es de 440 mg/l, por lo que también en este caso todas las líneas exceden el límite.
Los trabajos sobre la obra en Paso Belastiquí están dentro de los tiempos estipulados y se espera la inminente llegada de 500 metros de caños provenientes de Brasil y otros 500 más que llegarán hoy, claves para terminar el trabajo, según informó el diario El País de Uruguay. La obra permitirá el ingreso y la salida de agua proveniente del Río de la Plata al embalse Belastiquí-Aguas Corrientes, así como la retención del agua ingresada al embalse, lo que servirá para mantener el volumen y no perder agua con la fluctuación de las mareas.
El gobierno uruguayo estima que la obra estará finalizada dentro de un mes y asegura que los tiempos dependen de que lleguen los caños de Brasil.
Luego de declarar emergencia hídrica en el área metropolitana de Montevideo, donde vive más de la mitad de la población, el gobierno anunció el mes pasado la creación de un Fondo de Emergencia Hídrica para “garantizar a los ciudadanos todos los recursos necesarios” para enfrentar la sequía. Según el Inumet no se pronostican lluvias para la zona en el corto plazo. “Tenemos anomalías de lluvias positivas en la primavera. Esto sugeriría que las lluvias fuertes y recurrentes comenzarán en septiembre”, dijo el director climático Mario Bidegain.