Cristina Caamaño era la rectora hasta que el gobierno designó a un interventor; ella denunció que la mantuvieron ilegalmente encerrada junto a un grupo de profesores; el Gobierno aduce que Caamaño quiso “tomar por asalto” el edificio.
gentes de la Policía Federal Argentina (PFA) se apersonaron este lunes en la sede de la Universidad Nacional de Madres de Plaza de Mayo, sobre la calle Defensa al 119, e impidieron el ingreso de estudiantes y docentes a la sede educativa. Fuentes de la PFA dijeron a LA NACION que el operativo se había realizado “en cumplimiento de una medida judicial”.
Por su parte, Cristina Caamaño, ex interventora de la AFI con Alberto Fernández y titular de la casa de estudios, sostuvo que la comunidad académica recibió un correo electrónico del rector organizador de la universidad, Eduardo Maurizzio, que informaba sobre el cierre momentáneo de la institución por “falta de matafuegos y otras cuestiones”. La casa de estudios y organizaciones de DD.HH acusaron al Gobierno de “violar la autonomía universitaria”.
A horas del mediodía, la cuenta oficial en X de las Asociación de Madres de Plaza de Mayo informó: “Denunciamos al mundo que el gobierno criminal de Javier Milei impide a través de uniformados de la Policía Federal el ingreso de los trabajadores de nuestra universidad a su sede para cumplir su tarea. La medida viola la autonomía universitaria y pretende criminalizar a los trabajadores de nuestra universidad. Convocamos a toda la comunidad de la UNMa, a los sindicatos, a las organizaciones sociales y a los partidos políticos a poner freno a este atropello. Para la mano, [Javier] Milei. Si sos tan vivo, metete con las Madres”.
En contraposición, fuentes de la Secretaria de Educación, que depende de Capital Humano, detallaron a LA NACION que en la universidad operaba un “caos administrativo sostenido por meses” y que “no estaban cumplidas las medidas de seguridad mínimas -no había matafuegos ni seguros contratados-“. “Por lo tanto, el rector normalizador [Eduardo Maurizzio] decidió cerrar la sede hasta poder cumplir con esos estándares”, precisaron. Mientras que Caamaño denuncia haber quedado atrapada dentro del edificio por varias horas a raíz del operativo de las fuerzas de seguridad, desde la secretaría que lidera Carlos Torrondel acusan a la rectora de la UNMa y a “un grupo de personas” de agredir a personal del Ministerio de Justicia, lo llevó a la cartera a pedir un cordón policial por “protección”.
Por su parte, en declaraciones a Futuröck FM, Mariela Canessa, Secretaria General de la Asociación Docente del Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo (ADIUNMa), dijo: “Cuando los no docentes se acercan para empezar a trabajar, junto con la rectora, les impiden el ingreso y les dicen que solo pueden subir a retirar sus cosas. Cuando ingresan a la universidad, les cierran la puerta, la persiana general, con llave y no pueden salir más”.
A pesar del tenso episodio, la actividad educativa en la institución no se vio afectada. “Hoy va a haber clases normalmente. Esta es universidad vespertina, donde las clases empiezan a las 17. Va a ser un día como cualquier otro”, destacó la rectora de la Universidad Nacional de Madres de Plaza de Mayo. Luego, en declaraciones a este medio, desmintió que haya habido alguna “orden judicial o inspector” que autorizara el cierre momentáneo de las casa de estudios.
“Nunca pasó nada. Sí es cierto es que están vencidos los matafuegos. Pero no hay plata para pagarlos. Mientras insisten con esto, los docentes no cobran los sueldos que tienen que cobrar y tampoco nos pasan un peso para gastos de funcionamiento”, remarcó Caamaño. Y completó la idea: “Que nos pasen la guita que no tienen que pasar. Nos quieren asfixiar financieramente. Quieren el cierre de la universidad. No le interesan los derechos humanos al Gobierno”.
Si bien Camaño afirmó a este medio que todavía cumple funciones como rectora de la UNMa, Eduardo Maurizzio aclaró en un comunicado: “El Ministerio de Capital Humano hizo cesar el mandato de Rectora Organizador de Cristina Caamaño el 25 de febrero. En virtud de ello, la única autoridad constituida de la Universidad Nacional de Madres de Plaza de mayo es la que se expresa a través del Rector Organizador designado por la Resolución N°524/2024″.
La designación de Eduardo Maurizzio como rector interventor de UNMa
La Universidad Nacional de Madres de Plaza de Mayo fue intervenida a finales del mes de julio por el Ministerio de Capital Humano, que dirige Sandra Pettovello. A través de la Resolución N°524/2024, la cartera desplazó a Caamaño de la conducción de la institución y puso al frente a Eduardo Maurizzio, actual interventor de la UNMa. Caamaño había sido designada en noviembre de 2023 por el Ministerio de Educación -entonces conducido por Jaime Perczyk– como rectora “ad honorem”.
A fines de febrero de este año, Capital Humano estableció un “proceso de revisión de la creación e inicio de actividades académicas de las nuevas instituciones universitarias nacionales creadas” por distintas leyes “con el fin de determinar el efectivo cumplimiento del procedimiento para su creación y funcionamiento objetivo”. Entre ellas está la ley 27.731, norma sancionada en septiembre de 2023 y que permitió la creación de la Universidad Nacional Madres de Plaza de Mayo.
El ministerio dejó sin efecto además la resolución ministerial que le otorgaba el cargo a Caamaño. Meses después, una vez finalizado el proceso de revisión, Maurizzio fue designado al mando de la casa de estudios y se le encomendó llevar adelante un “proceso de normalización” de la universidad. El actual interventor había desempeñado tareas en el Instituto Superior de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo bajo el mandato del secretario general Jacobo Grossman.
Desde el desembarco de Javier Milei en Casa Rosada, la institución educativa acusa al líder de La Libertad Avanza (LLA) de tener intenciones de imponer un “desfinanciamiento ilegal” de la casa de estudios para, eventualmente, cerrarla.